Admito que mi participación en la blogsfera es irregular y hasta cierto punto casual, ya que no mantengo un margen de publicación periódica, sino mas bién publico muchos artículos el mismo día, lo que consecuentemente resulta tedioso para el lector y hasta confuso para el visitante. Aunque tengo razones de peso para justificar mi ausencia y falta de periodocidad en las publicaciones, debo admitir que la publicación en este blog en principio es netamente experimental. Quiero saber si efectivamente los buscadores redireccionan a los cybernáutas a mi blog, y además si alguno de ellos leería mis artículos y considerara que alguno de ellos merece un comentario, y felizmente puedo decir que ha funcionado muy bien, aunque no en gran medida, pero si he tenido contacto con personas de España,Colombia y otros países.
Habiendo hecho ya estas aclaratorias, continuo con el objeto de este artículo.
Hoy, 15 de mayo de 2008 es el ¨Día del Padre¨. Un día digamos especial, para los padres, en el que se hace una especie de reconocimiento a sus esfuerzos como sostén de familia, modelo a seguir, amigo, algunas veces energúmeno, y otras cómplice.
Se dice, que madre sólo hay una, y que padre puede ser cualquiera. Cualquiera que tome la responsabilidad de guiar, adoctrinar, ayudar, consolar, defender a su hijo a toda costa; capaz de hacer los sacrificios necesarios por brindarle estabilidad socio-económica y proveer mucho mas de lo necesario para la supervivencia, aunque esto signifique olvidar su comodidad y hacer a un lado sus intereses personales.
Éso es ser un padre. Es un símbolo de respeto, confianza, responsabilidad, honor y protección. Es la entidad que siempre estará ahí cuando estes en peligro, cuando necesites un consejo, cuando la confusión se apodere de tus sentidos, y al pasar los años será la persona que guiará tus pasos en el complicado mundo de las leyes, negocios, entidades gubernamentales, cuerpos de seguridad y demás. El es la no sólo la voz de la experiencia, sino una enciclopedia práctica e ilustrada de la vida.
Lamentablemente, todo lo expuesto en las líneas anteriores es mi concepto personal (y admito que un poco romantizado) de un papá, lo que significa que en realidad no todos los papás son así. ¿Sería excelente, no crees?, que todos los papás tuvieran todas las caracteristicas que mencioné antes, y que además tuvieran una personalidad adorable.
En mayor o menor medida, cuando nos hacemos papás iniciamos un proceso de transformación, durante el cual hacemos una proyección instrospectiva y evaluamos nuestras prioridades y metas a corto y largo plazo, para finalmente reajustar nuestro concepto de la realidad a las responsabilidades que implica ser un papá; reestablecemos valores, fijamos metas, establecemos como prioridad la calidad de vida y estabilidad, tanto económica como emocional, de nuestro vástago, y tomamos la interpérrita desición de crear un patrimonio tangible, próspero y productivo para asegurar su bienestar en nuestra ausencia.
Éso es amar de verdad a alguien. Dedicarle tu vida, tu esfuerzo, sacrificios a tu hijo, sin decirle absolutamente nada. Recordarle a cada momento todo lo que has hecho por el, lo que cuesta mantener un hogar, cómo sacrificas tu bienestar y comodidad para que el pueda estar cómodo, repertirle sin cesar cuáles eran tus sueños y cómo tuviste que dejarlos a un lado por ayudarle a cumplir los suyos; éso es hipocresía, rencor, frustración y por encima de todo es romper el código paternal, en el que te prometes a tí mismo asegurar la supervivencia de tu estirpe a toda costa; acumular todas tus preocupaciones, dolencias, decepciones, frustraciones, y desilusiones para tí y siempre mantener una postura de calma y temple ante cualquier situación; y por encima de todo ser comprensivo y guiarle cuando estén en la etapa mas dificil de sus vidas, cuando creen que son los dueños del monopolio de la verdad y no comprenden aún la complejidad del mundo real, el mundo de los adultos.
Al principio, papá es el señor que impone las reglas, luego se transforma en el ogro que te esclaviza; más adelante es un sabelotodo que vive sermoneándote con que debes y no debes hacer, porque esto te conviene y aquello no, y cuidado con aquél, y la calle no trae nada bueno; después mágicamente se transforma en un super héroe capaz de levantarse todos los días a las 5am, trabajar sin parar hasta la noche para llegar a la casa y destapar la cañería de la cocina e instalar una repisa en tu habitación para que puedas ordenar tus libros, y finalmente tomar una ducha, una cena rápida y dormir para repetir la faena,todos los días, sin parar; y al pasar de los años se transforma en tu mejor amigo, al que le pides consejos sobre un negocio, o es tu fiador para un préstamo, o te invita un whisky el 24 de diciembre, y aunque sigue sermoneándote, ahora comprendes la verdadera importancia de sus palabras y tratas de sacarle el máximo provecho a su sabiduría, porque sabes que no le queda mucho tiempo más, y te lamentas de no haberlo aprovechado antes.
Ser papá es un paso que sólo cada uno de nosotros sabe cuando dar, e irónicamente nunca estaremos preparados para serlo, porque no hay cursos especiales, ni carreras universitarias, ni libros ilustrados que puedan siquiera darnos una somera idea de la complejidad de ser papá, y del cambio drástico que representa tener un hijo.-
Habiendo hecho ya estas aclaratorias, continuo con el objeto de este artículo.
Hoy, 15 de mayo de 2008 es el ¨Día del Padre¨. Un día digamos especial, para los padres, en el que se hace una especie de reconocimiento a sus esfuerzos como sostén de familia, modelo a seguir, amigo, algunas veces energúmeno, y otras cómplice.
Se dice, que madre sólo hay una, y que padre puede ser cualquiera. Cualquiera que tome la responsabilidad de guiar, adoctrinar, ayudar, consolar, defender a su hijo a toda costa; capaz de hacer los sacrificios necesarios por brindarle estabilidad socio-económica y proveer mucho mas de lo necesario para la supervivencia, aunque esto signifique olvidar su comodidad y hacer a un lado sus intereses personales.
Éso es ser un padre. Es un símbolo de respeto, confianza, responsabilidad, honor y protección. Es la entidad que siempre estará ahí cuando estes en peligro, cuando necesites un consejo, cuando la confusión se apodere de tus sentidos, y al pasar los años será la persona que guiará tus pasos en el complicado mundo de las leyes, negocios, entidades gubernamentales, cuerpos de seguridad y demás. El es la no sólo la voz de la experiencia, sino una enciclopedia práctica e ilustrada de la vida.
Lamentablemente, todo lo expuesto en las líneas anteriores es mi concepto personal (y admito que un poco romantizado) de un papá, lo que significa que en realidad no todos los papás son así. ¿Sería excelente, no crees?, que todos los papás tuvieran todas las caracteristicas que mencioné antes, y que además tuvieran una personalidad adorable.
En mayor o menor medida, cuando nos hacemos papás iniciamos un proceso de transformación, durante el cual hacemos una proyección instrospectiva y evaluamos nuestras prioridades y metas a corto y largo plazo, para finalmente reajustar nuestro concepto de la realidad a las responsabilidades que implica ser un papá; reestablecemos valores, fijamos metas, establecemos como prioridad la calidad de vida y estabilidad, tanto económica como emocional, de nuestro vástago, y tomamos la interpérrita desición de crear un patrimonio tangible, próspero y productivo para asegurar su bienestar en nuestra ausencia.
Éso es amar de verdad a alguien. Dedicarle tu vida, tu esfuerzo, sacrificios a tu hijo, sin decirle absolutamente nada. Recordarle a cada momento todo lo que has hecho por el, lo que cuesta mantener un hogar, cómo sacrificas tu bienestar y comodidad para que el pueda estar cómodo, repertirle sin cesar cuáles eran tus sueños y cómo tuviste que dejarlos a un lado por ayudarle a cumplir los suyos; éso es hipocresía, rencor, frustración y por encima de todo es romper el código paternal, en el que te prometes a tí mismo asegurar la supervivencia de tu estirpe a toda costa; acumular todas tus preocupaciones, dolencias, decepciones, frustraciones, y desilusiones para tí y siempre mantener una postura de calma y temple ante cualquier situación; y por encima de todo ser comprensivo y guiarle cuando estén en la etapa mas dificil de sus vidas, cuando creen que son los dueños del monopolio de la verdad y no comprenden aún la complejidad del mundo real, el mundo de los adultos.
Al principio, papá es el señor que impone las reglas, luego se transforma en el ogro que te esclaviza; más adelante es un sabelotodo que vive sermoneándote con que debes y no debes hacer, porque esto te conviene y aquello no, y cuidado con aquél, y la calle no trae nada bueno; después mágicamente se transforma en un super héroe capaz de levantarse todos los días a las 5am, trabajar sin parar hasta la noche para llegar a la casa y destapar la cañería de la cocina e instalar una repisa en tu habitación para que puedas ordenar tus libros, y finalmente tomar una ducha, una cena rápida y dormir para repetir la faena,todos los días, sin parar; y al pasar de los años se transforma en tu mejor amigo, al que le pides consejos sobre un negocio, o es tu fiador para un préstamo, o te invita un whisky el 24 de diciembre, y aunque sigue sermoneándote, ahora comprendes la verdadera importancia de sus palabras y tratas de sacarle el máximo provecho a su sabiduría, porque sabes que no le queda mucho tiempo más, y te lamentas de no haberlo aprovechado antes.
Ser papá es un paso que sólo cada uno de nosotros sabe cuando dar, e irónicamente nunca estaremos preparados para serlo, porque no hay cursos especiales, ni carreras universitarias, ni libros ilustrados que puedan siquiera darnos una somera idea de la complejidad de ser papá, y del cambio drástico que representa tener un hijo.-
1 comentario:
Lindo leerte David, verdadero lo que expresas, pero piensa que responsabilidad tiene ese ser...
también existen los que ni se enteran que tienen hijos y ni saben que se pierden, pero amigo así es la vida.
Agradezco que nos compartas tus relatos.
Abrazos
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